Un mundo propio, exposición de ilustradoras extremeñas comisariada por Beatriz Pereira

Un mundo propio es una exposición colectiva de ilustradoras extremeñas comisariada por Beatriz Pereira y organizada por la Consejería de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deporte de la Junta de Extremadura, que se podrá ver en la Sala Europa de Badajoz hasta el 19 de julio [verano cerrado] y del 2 al 30 de septiembre.

Decía Georgia O’Keeffe que se requiere valor para crear un mundo propio. En este caso, cinco artistas, Amanda Sinsanto, Celia Conejero, Clara Trash, María Polán y Marta Barroso, lo tienen también para ilustrarlo. Porque no es fácil ser mujer y artista, y tampoco serlo en Extremadura.

El trabajo de ilustración suele ser el gran desconocido entre todas las artes. Un mundo propio, propone un paseo a través de cinco miradas hacia cuatro grandes ámbitos, donde cada personalidad y estilo confluye hacia diferentes cuestiones tratadas desde un prisma personal. Mujer, naturaleza, literatura y cultura, son los cuatro bloques en los que cada artista expone su visión más allá del dibujo. Esta exposición no solo pretende poner en valor la ilustración de cinco artistas extremeñas de manera visual, si no que transita, a través de la interacción directa con las obras, la manera de entender su trabajo.

Mural Vaginas dentadas, obra de Amanda Sinsanto © 2024. Paula Rosell

La ilustración de Amanda Sinsanto (Zafra, 1983) recorre obras transgresoras en temática y color como El miedo o las vaginas dentadas, que paulatinamente se suaviza hacia figuras más desdibujadas y la mancha de color más diluida, como en los poemarios de los autores extremeños Manuel Pacheco y Rosa Lencero o populares canciones de copla; por otro lado, Celia Conejero (Plasencia, 1980) propone una mirada más colorida. Con la ilustración digital trabaja temas como la sociedad patriarcal desde la época en la que crecieron nuestras madres o abuelas hasta nuestros días; nos hace navegar a través de extraordinarios árboles extremeños como si de un panel informativo se tratase y nos muestra su propia interpretación de portadas de libros o carteles de conocidas películas de cine.

Por otra parte, el trabajo de Clara Trash (Cáceres, 1992), desde una apariencia puramente pop, trabaja problemáticas actuales relacionadas con nuestra imagen o las redes sociales, propone una interpretación millennial de la lectura o del clásico bodegón, y reinterpreta populares escenas de películas y series de los 90-00’s. María Polán (Cáceres, 1979), presenta una obra de gran realismo y figuración, de colores más suaves y una potente manufactura técnica, trabajando sobre la igualdad, los cuentos clásicos, ilustrando las palabras de la poeta pacense María José Flores o las canciones del grupo extremeño-gallego Milana. Por último, la artista Marta Barroso (Jerez de la Frontera, 1991), que, con tan solo cuatro añitos aterrizó en Cáceres, además de sus características cigüeñas, o las ilustraciones de Federico García Lorca, nos muestra otras vertientes de la ilustración como el trabajo textil, la cerámica o el grabado; asimismo, expone la cartelería ilustrada para obras teatrales extremeñas.

Un mundo propio se organiza como un eje que, según se configura, se retroalimenta, mostrando piezas sobre feminismo, cultura general –y extremeña–, o publicaciones literarias, a través de técnicas dispares como el dibujo manual, digital, el grabado, la cerámica, el audio o el vídeo; como dispar, a la vez que propio, es el trabajo de las cinco artistas extremeñas que presentamos.

Cada eje que divide la exposición se acompaña de un color que, junto a toda la identidad gráfica, ha sido cuidadosamente escogido por Alba Rodríguez de Agencia Dimentia.

Así, el violeta de mujer, «representa la introspección y la riqueza emocional»; naturaleza, como no podía ser de otra manera, lleva «un color verde, pero no uno cualquiera: un verde claro y fresco que remite a los paisajes naturales resaltando la belleza y la tranquilidad del entorno natural». Por otra parte, la literatura ha sido representada con «un tono terracota que evoca la textura y el color de las encuadernaciones antiguas. Este color cálido y terroso simboliza una conexión directa con la tradición y el patrimonio literario». Y, por último, en cultura vemos «un lavanda suave que sugiere creatividad y diversidad. El tono es suave y acogedor, invitando a los espectadores a sumergirse en las diversas manifestaciones artísticas y culturales que enriquecen nuestra sociedad».

¿Quieres visitar la exposición?

Horario de apertura habitual:

  • Miércoles a sábado de 11 a 13:00 h y de 19 a 21:00 h

  • Lunes, martes, domingos y festivos cerrado.

Sala Europa. Avenida de Europa 2, 06004, Badajoz

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